Tierras públicas, negocios privados
Vecinos de caballito denuncian que un amigo de Macri usurpó el corredor verde del oeste
La empresa constructora de Nicolás Caputo, instaló un showroom en terrenos fiscales. Invirtió 93 millones de pesos en la edificación de dos torres. Los legisladores porteños preparan un pedido de informes.
La constructora del amigo personal de Mauricio Macri –y fugaz funcionario de su gobierno– Nicolás Caputo, instaló el showroom de su nuevo emprendimiento inmobiliario en terrenos fiscales. Se trata de Dosplaza Departamentos, un proyecto que prevé la construcción de dos torres de 33 pisos en donde se encontraba la molinera Morixe, a metros de las vías del ferrocarril Sarmiento.
Organizaciones sociales del barrio de Caballito denunciaron la situación al tiempo que legisladores porteños presentaron un pedido de informes al Ejecutivo para que explique las razones de la cesión de un predio público a empresas privadas y “el posible impacto medioambiental que afectará el entorno urbano, el paisaje y la calidad de vida de los vecinos”.
La misma semana que la Legislatura de la Ciudad de Buenos Aires aprobó limitaciones para la construcción de torres en el barrio de Caballito, comenzaron las obras de Dosplaza Departamentos, la flamante propuesta arquitectónica que Caputo Construcciones y Rukán Desarrollos Inmobiliarios levantarán ni bien terminen de demoler las instalaciones de Molinos Morixe. En ese predio se erigirán los 54.753 metros cuadrados distribuidos en 524 unidades habitacionales que tendrán “un costo de 93.517.000 pesos más IVA” según el documento que la compañía presentó ante la Comisión Nacional de Valores.
Por fuera de la propiedad –en un terreno fiscal, según consta en la plancheta catastral de la ciudad de Buenos Aires– el grupo constructor instaló un lujoso showroom donde promocionan y comercializan los departamentos. Desde principios de mayo, los empleados ubicados sobre la calle Federico García Lorca (ex Cucha Cucha), reciben decenas de consultas por las viviendas de primera categoría, cuyo valor no baja de los 2.000 dólares el metro cuadrado. “Parques, pileta, área de deportes, solariums, en definitiva, otra forma de vivir en pleno corazón de Caballito”, sugiere el folleto que se llevan los interesados en convertirse en una de las 500 familias que habitarán el lugar, a mediados de 2010. “La ordenanza 24.802 de 1969 estableció la propiedad pública de los terrenos en una franja de 30 metros a ambos lados del tendido de ferrocarril”, explicó Gustavo Desplats, coordinador de la organización Proto Comuna Caballito. “El Estado nacional le cedió al gobierno de la ciudad las 17 manzanas que van desde Neuquén y Honorio Pueyrredón hasta Donato Alvarez para la realización del Parque Caballito, como parte del Corredor Verde del Oeste, una iniciativa tendiente a parquizar la zona luego del soterramiento del ferrocarril”, detalló Desplats. El dato fue confirmado por quien firmó el acuerdo como jefe de Gobierno, Enrique Olivera. “A principios de 2000, suscribimos un convenio con el ONABE por el cual se nos otorgó en tenencia esos terrenos para darle un aprovechamiento recreativo”, recordó el hoy legislador de la Coalición Cívica.
Durante su gestión como diputado nacional, Rafael Bielsa presentó un proyecto donde se solicitaba “la transferencia del inmueble propiedad del Estado nacional ubicado en el entorno de la estación Caballito del ferrocarril Sarmiento, afectado al Organismo Nacional de Administración de Bienes, a la ciudad autónoma de Buenos Aires para la creación del Parque del Bicentenario”. La iniciativa no prosperó. Pero las planchetas con los planos y los dominios catastrales presentadas “muestran que los terrenos donde hoy se levanta el showroom de Caputo son públicos”, explicó Desplats.
A CONFESIÓN DE PARTE. Crítica de la Argentina pidió información al grupo constructor a través de la consultora que maneja las relaciones institucionales de la empresa. Uno de los arquitectos responsables del emprendimiento inmobiliario, en nota cursada a esta redacción, confirmó el dato más polémico de esta investigación. “El lote donde se encuentra el salón de ventas esta administrado por el ONABE, como parte de los bienes residuales de Ferrocarriles Argentinos”, explicó Luis Gradín, de Rukán Desarrollos Inmobiliarios. “Estamos en el terreno porque Morixe nos cedió los derechos y acciones derivados de su posesión pacífica e ininterrumpida durante mas de 20 años”, explicó. Y aclaró finalmente: “continuamos haciendo uso de dichos derechos adquiridos y cedidos, pero la construcción del showroom es provisoria y nuestra intención es concluir lo antes posible para devolver la tenencia definitiva del inmueble”.
Un ex funcionario del área de planeamiento urbano y actual asesor parlamentario de la Coalición Cívica, Germán Gómez Coronado, refutó al representante de la empresa: “en ese predio no se puede construir nada que no tenga que ver o con la actividad ferroviaria o con la actividad que desarrollaba Morixe hasta que dejó de ocuparlo; cualquier otra cosa necesita aprobación de la Legislatura”, detalló. “Además, una empresa no puede cederle a otra algo que pertenece al Estado, los derechos de uso adquiridos por Morixe son intransferibles”, afirmó el especialista.
Preguntas sin respuestas
La Legislatura porteña deberá tratar esta semana un pedido de informes al Poder Ejecutivo, para que dé explicaciones “sobre la construcción realizada por la empresa Caputo Construcciones en la parcela sita entre García Lorca, vías del Ferrocarril Sarmiento, Martín de Gainza y los terrenos del molino Morixe”. [Crítica]
